Michele Edwards-Collie
Michele Edwards-Collie tiene más de 30 años de experiencia bancaria. Michele se especializa en brindar asistencia para el pago inicial y educación para compradores de vivienda por primera vez en la comunidad del sur de Florida.
Un comienzo casual
La compra de viviendas es un campo al que llegó por casualidad mientras asistía a la Universidad Estatal de Florida. En ese momento, ella estaba estudiando Comunicaciones con aspiraciones de convertirse en una periodista de televisión. Después de comenzar sus prácticas en la universidad, se dio cuenta rápidamente de que no era el campo para ella. En su último año, decidió cambiar de rumbo. Una buena amiga le mencionó que había una vacante en un banco del campus que buscaba a alguien con un título de comunicación, así que decidió presentarse.
«Tuve una entrevista y me ofrecieron varios puestos, pero acabé eligiendo empezar en el Nations Bank. Tenían un programa de formación en gestión que me interesaba mucho, así que pasé por el programa y finalmente me convertí en directora de sucursal».
Michele eventualmente hizo la transición al departamento de hipotecas, antes de marcharse a Countrywide Home Loans como directora de ventas. Su experiencia allí la llevaría a abrir su propia empresa hipotecaria, aunque volvería al banco para especializarse en programas para compradores de primera vivienda.
«Esto es lo que me llevó al puesto que tengo ahora, porque empecé a centrarme en la parte de desarrollo comunitario de la banca, es decir, ¿qué está haciendo el banco para ayudar a las comunidades a las que servimos? Así que, a su vez, empecé a aprender más sobre las diferentes regulaciones que tiene el gobierno para que los bancos satisfagan ciertas necesidades de la comunidad.»
Perfecciones actuales
Fue a través de una elección que la llevó a convertirse en Vicepresidenta Senior y Directora de Desarrollo Comunitario CRA del City National Bank of Florida.
«Hace once años, empecé a trabajar estrictamente con compradores de primera vivienda. Eso me llevó por este camino, y estoy muy agradecida de haber tomado esa decisión».
Fue la oportunidad de ayudar a las personas y el poder tener un impacto en sus vidas lo que motivó a Collie y la hizo entusiasmarse por llegar al trabajo cada día. Hoy se encuentra en una posición en la que nunca creyó que estaría, pero su formación en comunicación ha resultado ser una bendición.
«Tengo la oportunidad de ayudar a tanta gente, especialmente a aquellos que no podrían comprar una casa sin la ayuda de alguien como yo. Trabajamos con muchas familias de bajos ingresos, que no cumplen los requisitos de los programas hipotecarios tradicionales. Mi objetivo es ver cómo el banco puede crear programas que hagan que ser propietario de una vivienda sea asequible y esté al alcance de todos. Al final, no se trata de números, sino de comunicarse con la gente, ver cuáles son sus necesidades y luego juntar todas las piezas del rompecabezas.»
Marido o casa
El drama y la persistencia llevaron a una clienta a su casa y a Michele a un viaje que nunca olvidará.
«Mi cliente quería comprar una casa, pero su marido no quería comprarla en absoluto. Estaba centrada en conseguir que ella y su hijo tuvieran una casa después de haber alquilado durante tanto tiempo. Pero su crédito era malo y ella tenía bajos ingresos, así que su marido tenía que estar en el papeleo».
Debido a su mal crédito y el haber cambiado de trabajo, no podía acceder a una hipoteca por sí sola. Algo que supondría el principio del fin de una relación, pero la apertura de una puerta a un nuevo hogar.
«Ella dijo: ‘Él ni siquiera quiere comprar una casa, su crédito es malo, y no quiero pasar por todo esto yo y que luego él se quede con los beneficios’. Así que le dije: ‘Bueno, así es como funciona’. Ella me miró y dijo: ‘No, ¿sabe lo que creo que es? Estamos en dos niveles diferentes y por eso quiero divorciarme'».
Aunque ciertamente no tenía ningún deseo de abrir una brecha entre una pareja casada, la información que Michele presentó había dado luz sobre los problemas del matrimonio de su cliente. Hizo que la mujer se diera cuenta de que quería una vida diferente para su hijo. Después de esperar a que se divorciara, el siguiente paso fue asegurar su estabilidad laboral.
«Mientras esperábamos que finalizara su divorcio, seguía pasando de un trabajo a otro. Una de las cosas que tomamos en cuenta para aprobar un préstamo hipotecario es la estabilidad laboral. Así que le dije, escucha, tienes que encontrar un trabajo en el que pueda quedarse durante un tiempo. Quédese seis meses y cuando empecemos el proceso habrá pasado un año y comience a ahorrar su dinero».
Aunque se mantuvieron en comunicación, la mujer tardaría dos años y medio desde su planificación inicial en estar realmente preparada para comprar. Con el crédito reconstruido y el dinero adecuado ahorrado, por fin empezó a buscar una casa. Pero sería una tarea más fácil de decir que de hacer.
«Me llamó un día y me dijo: ‘Señorita Michele, después de haber hecho todo esto, no hay casas por ahí’. Era un domingo, y nunca lo olvidaré porque ella es el tipo de persona que llama, le sale el buzón de voz e inmediatamente vuelve a llamar. Así que al final contesté y me dijo: ‘He salido a buscar con mi agente inmobiliario y no hay nada, he hecho todo esto para nada'».
Y en ésta ocasión sería Michele quien tendría que tranquilizar a su cliente diciéndole que todo lo que había hecho era por una razón. Y la animó diciéndole que lo que Dios tiene para usted, es para usted y a que tuviera paciencia, que la casa adecuada llegaría.
«Le dije: «No ha hecho todo esto para dejarlo aquí, para seguir alquilando». Unas dos semanas después, firmó el contrato. Después de encontrar la casa, me llamó toda emocionada. Me dijo: «No puedo creer que fuera a renunciar’. Le dije: «Genial, pero hay más trabajo que hacer. Tiene que conseguir una tasación, e inspecciones, tiene que pasar por este proceso’. Por el camino se desanimó, y tuve que mantenerla motivada, pero el día en que sorprendió a su hijo con su nueva casa, fue un día que nunca olvidaré».
Es una historia que todavía inspira a Michele
Su pensamiento es ayudar siempre a la gente, porque no todos tienen a alguien.
«Tuve un momento para pensar en esa historia porque está cambiado vidas. Estoy cambiando vidas, el trabajo que hacemos cambia vidas. Y sabe, a veces no tienen a nadie más. Y cuando pienso en eso ahora, al final del día, quién va a ayudarlos con el espíritu adecuado y a animarlos de verdad».
Collie participa activamente en varias organizaciones de servicio a la comunidad, como el Broward Housing Task Force, el Miami Dade Economic Advocacy Trust (MDEAT, por sus siglas en inglés) Housing Advocacy Committee, la Global Economic Development Corporation, la Housing Foundation of America y muchas otras organizaciones sin fines de lucro.
Anteriormente fue presidenta de la Fundación para la Juventud y el Desarrollo Económico y formó parte de la Junta Consultiva de Catalyst Miami, de la Campaña de Prosperidad del Condado de Miami Dade y de la Junta de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAREB, por sus siglas en inglés). Michele también es miembro de Delta Sigma Theta Sorority Inc, una hermandad de servicio público.
